El Dakar es la carrera más extrema del mundo, pero también tiene esas cosas de solidaridad en la ruta que la hacen una carrera única.
Y a 24 horas de comenzar una nueva edición de la competencia ocurrió uno de esos hechos que hablan del ya clásico «espíritu Dakar».
Resulta que el pasado miércoles mientras los pilotos realizaban las revisiones previas al inicio de la carrera, al corredor del equipo Rebellion, Alexander Pesci, se le incendió por completo el auto con el que participaría en la prueba. Esto lo dejaba fuera del certamen 2022.
Pero un «milagro» ocurrió, porque el príncipe qatarí, Nasser Al Attiyah, enterado de la desgracia, le regaló un auto al piloto para que pudiera afrontar la carrera.
Y no es cualquier vehículo, es la Toyota con la que ganó la versión 2019 de la carrera, el único de esta marca que se ha adjudicado el Dakar.
Según cuenta el medio español, Mundo Deportivo, «cuando Nasser se enteró de lo ocurrido, el jueves, se dirigió rápidamente a la carpa de Rebellion en el vivac de Jeddah. ‘En el camión tengo el Toyota con el que gané el Dakar 2019 en Perú. Si quieres correr el Dakar 2022 con él os lo doy. ¡Totalmente gratis!'», le dijo.
Y no es cualquier regalo el que ha hecho el qatarí, porque es una reliquia que había pedido ser reconstruida con el objetivo de guardarla en su museo en Qatar, pero ahora le dio un nuevo uso. El Rally Dakar se inicia este sábado de madrugada con una largada protocolar para el domingo comenzar con las etapas coronometradas.